El poeta italiano y su musa |
Siempre me he preguntado cómo era
posible que en un periodo tan oscuro como la Edad Media, en la que tantas cosas
se dan por supuestas (no siempre ciertas) y es muy difícil documentar cualquier
dato, se tenga constancia de la primera vez que Francesco Petrarca tuvo ante sus ojos a Laura: el 6 de abril de 1327 en la Iglesia de Santa Clara en
Aviñón.
Me ha venido esta reflexión
cuando hace unos meses escuché a un crítico musical diciendo algo así: “En los
próximos ocho años podríamos estar celebrando casi a diario el 50 aniversario
de cualquier hecho que tenga que ver con los Beatles”. Es curioso que desde el principio, por h o por b, haya
quedado documentado un encuentro, una visita o cualquier hecho de poca
trascendencia cuando ocurrió, pero que, con el paso del tiempo, se hizo
determinante en la historia del grupo y, por ende, de millones de personas,
entre las que me cuento.
Sabemos el día exacto en que Paul y John se conocieron; es más, podemos incluso acercarnos a la hora
exacta de ese encuentro. Sabemos qué día Brian
Epstein se acercó a The Cavern para ver/escuchar a esos muchachos de los
que toda la ciudad de Liverpool hablaba. También está documentado el primer
encuentro entre John y Yoko. En
definitiva, y para no ser muy prolijo, encuentros todos ellos determinantes en
sus vidas y en las de todos nosotros.
¿Recuerda el lector el día que
exacto en que conoció a su mejor amigo? ¿Y a su amada?
Bonita entrada. Yo soy un maniático de eso. Tengo una liturgia particular ocupadísima, porque me acuerdo de fechas insólitas.
ResponderEliminarPues amí me pasa lo mismo. Me acuerdo de cosas absurdas y, quizá, no recuerdo lo que comí anteayer. Pero tengo una memoria a largo plazo excelente y a corto plazo como Dory, la de Nemo. En fin, cosas veredes, amigo Swann.
ResponderEliminarPero centrándonos en la entrada, a mí siempre me ha parecido curioso que la labor de los biógrafos del grupo haya sido tan fácil. Si uno repasa las fechas importantes en su vida, difícilmente recordará, con exactitud, lo que en el caso de los Fab Four es documentable. Parece somo si estuvieran predestinados, desde elprincipio.